debajo del mar

Aveces no conseguimos despegarnos de ciertas cosas que nos hacen daño y no las dejamos marchar por miedo a perderlas pero, curiosamente, muchas veces ellas mismas se vuelven contra nosotros.
Tras un invierno largo y una primavera tranquila, el verano ha empezado revuelto, pero tras estos días bajo el agua he logrado encontrar la paz y tranquilidad perdidos en mi vida. El mar, la arqueología y tú,  habeis conseguido estabilizarme, hacerme feliz, serenarme, encontrarme a mi misma y volver a sonreír.  Sólo puedo darte la gracias por apoyarme.  El mar y la arqueología son mis pasiones y has logrado entenderlo. Has sabido escucharme y entender todo lo que me pasaba.
Ahora si dejo de lado mi pasado y me embarco en esta nueva aventura que es mi vida...

y ... al agua patos!!!!